ENTREVISTA AL SR. CARLOS VILLANUEVA
GASTROCULAR: Hola Carlos, empecemos por tu vida y obra, tu trayectoria en general…
Carlos Villanueva: Mi trayectoria vital… Yo vengo de una vida que podríamos llamar aburrida profesionalmente. Siempre me he dedicado a trabajos de despacho, diferentes actividades como los seguros y la administración de fincas. Este bar hace 9 años que lo conozco y desde entonces me ha gustado mucho. Al final tuve la oportunidad de comprarlo y lo compré… mi primera incursión en este mundo. Y bueno, me embarco en esta aventura pues como pasan muchas cosas en mi vida, cosas que me ha gustado hacer -como los perros, los caballos, la caza- y a las que luego me dedico profesionalmente… y aquí sigo.
Gin Tonic lo adquiero hace 4 años. Y ocurrió lo que en mis otras actividades, veo que a veces la gente no tiene ni idea de lo que hace, entonces me pongo a estudiar y a investigar sobre el tema, le echo codos al asunto. Comencé sin tener ni idea del mundo de la ginebra dejándome guiar por los criterios anteriores. Que conste que aunque yo no coincidía al 100% con ellos reconozco que eran los más profesionales de Málaga, pero claro… había cosas que no me cuadraban y dije “voy a superarme”. Bueno, pero eso lo he hecho siempre, en todas las actividades de mi vida, el intentar hacer las cosas bien. Y esa es la historia, mi trayectoria profesional, por decirlo de alguna manera.
G: Cuéntanos algo sobre el origen de este bar…
Carlos: Bien, Gin Tonic nace hace 9 años como el primer bar de copas de Málaga especializado en gin y se convierte en un clásico. Llega la crisis y le afecta bastante porque es un bar donde las copas son más caras, donde se paga un alquiler bastante elevado. Aclaremos que es un bar más caro que los bares de los alrededores, pero no más caro que Muelle Uno, o que los hoteles; tiene un precio medio-alto y por eso hay que darle un valor añadido para conseguir una buena relación precio-calidad, y es justamente en eso en lo que me empeño yo.
Lo compré hace 4 años. Lo que he hecho desde entonces ha sido mejorar el tema…
G: ¿Olfato comercial?
Carlos: Un capricho en realidad, yo estaba enamorado de este bar y lo sigo estando. Me gustaba el sitio, era algo nuevo para mí, yo estaba aburrido de mis ocupaciones. Por eso me meto siempre en estos berenjenales… he criado perros y caballos, me he dedicado a los bonsáis, he hecho muchas cosas en mi vida, hasta editar libros… soy un creativo.
G: ¿Cuáles son tus cambios y mejoras en el Gin Tonic que podemos visitar hoy en día?
Carlos: El concepto es parecido, lo que se ha hecho es aumentar la cantidad de ginebras. De una variedad inicial de 40 tipos yo he metido 110. De 6 tipos de tónicas hoy yo ofrezco veintitantas. De que las copas se ponían un poco al gusto del cliente… yo he ido productor por productor, estudiando cada ginebra, para saber qué tónica y botánicos recomendaban para cada una de ellas. Yo profesionalicé esa parte.
Cuestión, que de 80 referencias totales, hace 4 años, hemos pasado a 240. Llevar 240 referencias es complicado, y no creo que esta cifra la tenga ningún sitio de Málaga.
Este es un bar que lo he hecho a mi gusto, mejorando fallos que veía allí y aquí. De ese modo he cambiado la música, se ha mejorado el tema limpieza, he añadido unos protocolos… aquí todo el mundo tiene un protocolo de actuación. Profesionalizar, formar a la gente, que siempre te atiendan las mismas camareras y del mismo modo. Aquí las niñas hablan 4 o 5 idiomas, eso también lo he cuidado mucho, que el extranjero que venga se encuentre con alguien que lo pueda atender como corresponde, explicarle como es la ciudad, ayudarle, que no haya problemas de comunicación. Suena fácil pero no lo es.
G: O sea que tú has formado a tu staff…
Carlos: Por supuesto, primero me formé yo y luego las formé a ellas. El conocimiento debe preceder a la acción. En cualquier actividad es muy importante primero la formación, luego las ganas y entonces la experiencia. En ese orden. Claro, ocurre que si yo me meto en la barra a poner copas no tengo la habilidad de mis camareras, porque ellas lo hacen todos los días y cada una, además, tiene sus habilidades. Pero el método y el porqué se los he transmitido yo, y el cómo también para que entendiesen porqué había que hacer así las cosas.
Yo sé el bar que quiero, está en mi cabeza y lo persigo siempre. Porque una cosa muy importante en todo lo que hagas es tener unas ideas y unos objetivos, y ser fiel a ellos. No puedes cambiar de criterio cada dos por tres. Hombre, si hay algo equivocado por supuesto que lo cambias, pero no el concepto.
G: De comprar un bar, a profesionalizarlo, a convertirlo en un punto de referencia… ¿qué te lleva a crear una ginebra?
Carlos: Bueno, fue idea de Lourdes. Un día me dijo “oye, llevamos sirviendo 18000 gin tonics al año, ¿por qué no hacemos nuestra ginebra?”, y a partir de ahí empezamos a revisar todas las ginebras para ver cuáles nos gustaban y porqué. Hacer una ginebra es un tema muy complicado que conlleva mucho esfuerzo hasta que consigues lo que tú quieres. Y así nos lanzamos con la Gin Malaka 4 destilaciones y la Gin Malaka 2 destilaciones.
La Gin Malaka Premium tiene 3 destilaciones y una redestilación. Es una ginebra semiseca, clásica y de calidad. Tu imagínate que con toda la variedad que hay aquí tenía que hacer una ginebra muy buena, excelente, y yo creo que lo he conseguido. Otra cosa es que le guste a todo el mundo, pero, aquí en el bar, sale muy bien. Como mejor marida es con tónica de burbuja fina, Schweppes Premium, que le da un toque muy cítrico, y un twist de limón. No necesita nada más. También pensé en la comodidad de las camareras. Cuando una ginebra lleva 3 o 4 botánicos nos complica la vida tremendamente. Y a mí, por ejemplo, que me gusta el gin tonic, no me gusta tener muchas cosas en la copa, solo lo estrictamente necesario.
En cuanto a la Gin Malaka London Dry, es una ginebra también clásica y muy seca para un público determinado que le gustan las ginebras más fuertes en cuanto a alcohol. Esta marida con una tónica de burbuja gruesa, la Schweppes normal, y también lleva un twist de limón. Una combinación sencilla y sin tonterías y muy cómodo de servir.
Dos ginebras para tener en casa por su fácil preparado y por su calidad.
G: ¿Qué aportan de nuevo tus ginebras al mundo de las ginebras?
Carlos: Son dos ginebras de una calidad excelente pero con las que no he querido aportar nada nuevo. Creo que la gran aportación ya se hizo con la introducción en el mercado de las ginebras de fresa, y que no hay perspectivas de nuevas aportaciones.
Esa fue una idea genial, coparon el mercado. Los rankings de venta de alcohol del año pasado en España muestran que las ginebras de fresa consiguieron que la venta de ron cayera un 5 y 7 % cada año mientras que la venta de ginebra ha subido un 7%. Tras las ginebras de fresa todo lo demás son inventos fracasados. Yo he visto aquí ginebras hasta de zanahoria, pero nada. Creo que ya está todo inventado.
G: Desde tu punto de vista, ¿cuáles son las tres mejores ginebras en este momento en el mercado?
Carlos: Esa es una pregunta muy difícil, en otra entrevista me pidieron 6 y fue más fácil…
Según mi paladar la ginebra que más me gusta es la Junipero, una ginebra de San Francisco, que para mí es la mejor, la N° 1. Luego, por diferente, la Nordés, que es una ginebra muy afrutada y muy conseguida, es algo diferente que está muy bueno. Y después la Tanqueray Ten.
Y, por supuesto, la mía la primera, que se creó tras buscar y estudiar lo bueno de cada una de las otras; y que aquí en Málaga está teniendo mucho éxito, hay más de 100 establecimientos que la tienen. Ahora va a entrar en El Corte Inglés y en Paradores Nacionales. Meter una ginebra en el mercado es complicadísimo, hace falta muchísimo dinero y muchísimos medios que yo no tengo… así es que tengo que ir poco a poco y creando sinergias por todos lados.
G: ¿Hay algún otro sitio en Málaga, o en España en general, en el que te puedas tomar un gin tonic cuando tu bar está cerrado?
Carlos: Sí, pero no muchos. Uno… el que más me gusta es el Gin Corner, en Málaga. O La Ruleta, en Madrid, calle Velázquez, suelen preparar buenos gin tonics.
G: ¿Cómo ves el futuro del Gin Tonic?
Carlos: El Gin Tonic creo que es una cosa estable para una economía que está ahí. Date cuenta de que el momento económico de Málaga es malísimo, otra cosa es que haya mucho turismo. El problema del malagueño es que está muy tocado por la crisis, con un paro muy alto, pocos medios económicos… Yo sé que hay mucha gente que no viene aquí porque es más caro, pero que le gustaría venir. Así es que si la economía mejora, pues será un detonante para el Gin Tonic. Este bar es lo que es, 18 metros cuadrados, tampoco puedo esperar mayores cosas ni las quiero. He tenido muchas posibilidades de asociarme, de participar en bares o hacer bares más grandes, pero ya estoy mayor para eso. El tiempo libre lo tengo que dedicar a otras cosas.
G: ¿Cuál es la apuesta las nuevas tendencias?
Carlos: No creo que haya muchas más nuevas tendencias. La nueva gran tendencia ya se creó y fue la ginebra de fresa. Todo un acierto de una gente muy lista, lo han hecho muy bien. Luego el producto puede ser mejor o peor, gustar o no gustar… pero todo el mundo está copiando esa idea. Tras esto, no creo que el tema tenga más recorrido.
Hay gente que me dice que el futuro es el vodka, pero el vodka lleva cayendo 10 años y no creo que suba. Lo que sí veo es una tendencia a consumir más calidad. También veo que el ron está bajando, aunque pronto voy a sacar uno propio. Están aumentando las ventas de bebidas de calidad, un buen coñac, un buen champagne, un buen cava.
El gin tonic ha pasado de ser un combinado a un cocktail de trago largo, y es algo perfectamente conseguido. Tenemos clientes que nos felicitan. Un cliente inglés ha hecho un bar parecido a este. Hemos salido en la revista Rolling Stone. Hay gente que se lamenta porque no hay sitios en sus zonas donde se puedan tomar un gin tonic como los de aquí… y estamos hablando de gente de Inglaterra, la cuna de la ginebra, o de los Estados Unidos…
G: ¿Cuál es tu gin tonic favorito?
Carlos: Voy cambiando. Los tres que te comenté antes, Junipero – Nordés – Tanqueray Ten, y otros tres que voy rotando. No quiero que se me acostumbre el paladar.
G: ¿Tendremos una sucursal de Gin Tonic?
Carlos: NADA, yo lo que tengo que hacer es vender ginebra y centrarme en ello. Hacer lo que sea para que el bar funcione bien sí, pero abrir otro no.